Iglesia Católica

Iglesia Católica

Salmos - Capítulo 4

1 Al músico principal; sobre Neginot. Salmo de David. Respóndeme cuando clamo, oh Dios de mi justicia. Cuando estaba en angustia, tú me hiciste ensanchar; Ten misericordia de mí, y oye mi oración.

2 Hijos de los hombres, ¿hasta cuándo volveréis mi honra en infamia, Amaréis la vanidad, y buscaréis la mentira? Selah

3 Sabed, pues, que Jehová ha escogido al piadoso para sí; Jehová oirá cuando yo a él clamare.

4 Temblad, y no pequéis; Meditad en vuestro corazón estando en vuestra cama, y callad. Selah

5 Ofreced sacrificios de justicia, Y confiad en Jehová.

6 Muchos son los que dicen: ¿Quién nos mostrará el bien? Alza sobre nosotros, oh Jehová, la luz de tu rostro.

7 Tú diste alegría a mi corazón Mayor que la de ellos cuando abundaba su grano y su mosto.

8 En paz me acostaré, y asimismo dormiré; Porque sólo tú, Jehová, me haces vivir confiado.